Me levanto cada día y procuro sonreír... trato que mi sonrisa se asemeje a la de antes... complicado... mis ojos no saben mentir...
Intento ponerme metas, organizar mis días, aunque ahora me cuesta pensar en el futuro... poco a poco... pero mis ojos no saben mentir...
En el curro intento avanzar, cerrar una etapa... cuesta "un poco"... mis ojos no saben mentir...
Se trata de un proceso lento y duro, quizás por eso ahora me cuesta tanto mirar a los ojos de las personas cuando les hablo pero... es que mis ojos no saben mentir...
Pero no se alarmen... por largo que sea el camino, seguiré luchando... seguiré practicando en esto de reinventarse día tras día... ahora el final no genera incertidumbre, pues sé que cuando la vida decida que ha llegado mi momento, nos reencontraremos... mientras tanto... la procesión se lleva por dentro pero... mis ojos no saben mentir...
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